Las misiones jesuíticas guaraníes o reducciones jesuíticas guaraníes fueron un conjunto de treinta pueblos misioneros fundados a partir del siglo XVII por la orden religiosa católica de la Compañía de Jesús entre los indios guaraníes y pueblos afines, que tenían como fin su evangelización y de las cuales ocho se ubicaron geográficamente en el Paraguay.

 La Misión jesuítica de Santísima Trinidad del Paraná y la Misión jesuítica de Jesús de Tavarangué  en el distrito de Trinidad en Itapúa, fueron declaradas en 1993 Patrimonio de la Humanidad.